R-Biopharm le ofrece una nueva línea de producto: SeraSpot®, el nuevo Microspot array para diagnóstico múltiple de enfermedades autoinmunes.
En las enfermedades autoinmunes, el sistema inmunitario ataca las estructuras de su propio cuerpo. Los síntomas y por tanto el tipo de enfermedad varían en función de la estructura atacada (p. ej., nervios, articulaciones, hígado). Actualmente, se conocen en torno a 81 enfermedades autoinmunes distintas, las cuales pueden ser localizadas, afectar por ejemplo a un órgano concreto, o sistémicas.
Numerosas enfermedades autoinmunes se caracterizan por los autoanticuerpos. Los autoanticuerpos pueden ser directamente patógenos (p. ej., anti-GBM) o estar asociados a la enfermedad. Además, pueden ser valiosos como marcadores pronósticos (p. ej., anti-AMA-M2), útiles en el control del paciente (p. ej., anti-dsDNA) o necesarios para el diagnóstico diferencial (p. ej., anti-Mi2). Cabe destacar que cuanto antes se establezca el diagnóstico de la enfermedad autoinmune, mejor será el resultado para el paciente. Este principio resulta especialmente importante en enfermedades progresivas, como la reumática y la fibrótica, que pueden provocar pérdidas irreversibles.
Diagnóstico de enfermedades autoinmunes
Analizar los autoanticuerpos es un elemento central en el diagnóstico y el tratamiento de las enfermedades autoinmunes. R-Biopharm ofrece SeraSpot®, un nuevo Microspot array para el diagnóstico de enfermedades autoinmunes e infecciosas. Actualmente, la plataforma SeraSpot® comprende 4 Microspot arrays diferentes más el escáner de Microspot arrays para el diagnóstico de la enfermedad del tejido conjuntivo, enfermedad hepática autoinmune o vasculitis sistémica y enfermedad de Goodpasture.
Las enfermedades del tejido conjuntivo son enfermedades reumáticas inflamatorias y sistémicas que se caracterizan normalmente por una evolución crónica (enfermedades del tejido conjuntivo sistémicas) y síntomas que a menudo se solapan (síndromes que se solapan). Las enfermedades del tejido conjuntivo incluyen las enfermedades siguientes y normalmente se analiza a los pacientes para detectar anticuerpos antinucleares (ANA):
- Lupus eritematoso sistémico (LES) y subconjuntos
- Síndrome de Sjögren (SjS)
- Esclerosis sistémica (SS)
- Miositis idiopática (autoinmune)
- Enfermedad mixta del tejido conjuntivo (EMTC o síndrome de Sharp)
- Síndromes que se solapan.
La enfermedad hepática (EH) autoinmune primaria puede subdividirse en:
- Hepatitis autoinmune (HAI) tipos I a III
- Cirrosis biliar primaria (CBP)
- Colangitis esclerosante primaria (CEP)
- Enfermedad que se solapa con características de HAI y CBP o CEP.
Los síntomas clínicos de la EH son similares a los de otras enfermedades hepáticas crónicas y pueden progresar a cirrosis hepática. Solo un diagnóstico y tratamiento tempranos pueden evitar este desenlace. En aproximadamente el 15 % de los casos de enfermedad hepática crónica subyace una causa autoinmune, motivo por el que la determinación de diferentes autoanticuerpos resulta útil.
Los resultados de laboratorio en casos de hepatitis autoinmune incluyen resultados seropositivos para anticuerpos antinucleares (ANA), anticuerpos antimúsculo liso (F-actina), anticuerpos anti-microsomas de hígado y riñón tipo 1 (LKM 1) o anticuerpos anti-citosol hepático 1 (anti-LC1). Los anticuerpos pertinentes desde el punto de vista diagnóstico para la HAI se utilizan para la subclasificación de HAI, así como para la diferenciación de CBP.
La vasculitis sistémica primaria de vasos pequeños y medios/grandes de etiopatogenia desconocida se asocia con anticuerpos citoplasmáticos antineutrófilos (ANCA). Los tres tipos de vasculitis asociados con ANCA son:
- Ganulomatosis con poliangeítis (Wegener) (GPA)
- Poliangeítis microscópica (MPA)
- granulomatosis eosinofílica con poliangeítis (síndrome de Churg–Strauss) (EGPA).
Más del 90 % de los pacientes con GPA y MPA son positivos para ANCA. En la mayor parte de los estudios europeos, la especificidad del antígeno de ANCA de la MPA es predominantemente la mieloperoxidasa (MPO) y en casos de GPA es la proteinasa 3 (PR3). Los pacientes con EGPA son positivos para ANCA en el 50 % de los casos, especialmente MPO. La vasculitis asociada a MPO-ANCA es más frecuente en japoneses y chinos, mientras que la asociada a PR3-ANCA es más común en europeos. La glomerulonefritis es más frecuente y más grave en pacientes con vasculitis asociada a PR3-ANCA, en comparación con aquellos con vasculitis asociada a MPO.
La enfermedad de Goodpasture es una glomerulonefritis, con o sin hemorragia pulmonar, que se caracteriza por la presencia de anticuerpos circulantes antimembrana basal glomerular (anti-GBM). El reconocimiento y tratamiento tempranos de este síndrome es crucial para el pronóstico de la función renal. En ocasiones, el síndrome de Goodpasture puede estar superpuesto a la vasculitis sistémica positiva para ANCA. Además de los anticuerpos anti-GBM implicados en la enfermedad, en torno a un tercio de los pacientes afectados también presenta ANCA. Un resultado positivo para ANCA a menudo precede a los anticuerpos anti-GBM en unos meses o incluso años.
Seleccione una indicación
Seleccione una tecnología
Seleccione su producto de autoinmunidad
Noticias recientes
Otra información de interés
Asistencia en relación con autoinmunidad
¿Preguntas? Recurra a los conocimientos especializados de nuestro equipo. Le respaldamos a usted y su empresa en todas las fases del proceso analítico para garantizar su éxito